Transcripción de vídeo
Disculpe. - ¿Sí, señor?
Lo siento, escuché sin querer lo que dijiste.
Obviamente, eres masajista y acabamos de recibir un cliente que acaba de apuñalarte, ¿verdad?
Sí, acaba de apuñalarme. - De acuerdo.
Yo, ya sabes, si no te importa, puedo ofrecerte un masaje.